3 de diciembre de 2008

Good night (1968): Y ahí estaba el bueno de Ringo. Después de haber dejado a los Beatles porque el ambiente de la banda hervía más que el del planeta, volvía a sentarse a los tambores. El mejor baterista del mundo. Punto. Gracioso, borrachín, pacífico, pero sobre todo buen amigo. Buen amigo de John, buen amigo de George, buen amigo de Paul (que en la noche, luego de cada sesión, borraba las pistas de batería de Richard para grabarlas él), buen amigo de todos. Y ahí estaba. Cerrando con su voz, el satánico Álbum Blanco. Cantando una canción que Lennon le escribíera a su hijo Julian que apenas tenía 5 años. Deseaba las buenas noches en una época tan bella como aterradora. Buenas noches a ti, canta Ringo tiernamente, con la ternura y calidez de un buen amigo.

Felices todas las noches para todos. Sea esta la excusa para regalarle esta canción a Andrés Correa, amigo mío, hoy en su cumpleaños. Say No More.


No hay comentarios.: