Hay días (2006): Cuando escuché esta canción por primera vez, fue en la voz de su cantor en un bar pequeñito de cuyo nombre no suelo acordarme. Algunas metáforas son violentas e inaceptables, a continuación una. Cuando escuché esta canción por primera vez, fue en la voz de su cantor, y sentí como si un balazo me volara la tapa de los sesos. Falso. Alguien que no haya experimentado esa detonación cercana y sangrienta, no lo puede escribir tan "facilísticamente". No siento belleza en la violencia. Las metáforas violentas son perezosas y por lo tanto no deben ser admitidas. Prefiero las obvias porque son más cercanas y menos forzadas. Otra vez. Cuando escuché esta canción por primera vez, fue en la voz de su cantor, y sentí que muchos días de mi vida me atravesaban y recobraban vida robándome el aire presente en mis pulmones. La memoria es satánica y conveniente (y en nuestros tiempos, casi un lujo).
Domingo sin breves lapsos de mística química y sin momentos de eternidad, de esos que nos dan. Las canciones escuchadas no creen en el azar. Hoy el día me sabe a mierda. Pero sonrío.
Pala, siempre cerca y certero. No quise presentar una suya canción de esta forma pero hoy no había más. Era la canción o la pena. Preferí la canción. Gracias mil, mil veces más.
Al visitante, bástele saber que el cantor de esta canción es un Moby Dick.
2 comentarios:
ey!, la primera vez y de la única forma que he escuchado esta canción, es por los videos de youtube. Seguramente soy el que más visitó dicho videos. Demasiada verdad, demasiada melancolía, demasiada alegría, demasiado, demasiaod, con PALA siempre es demasiado...
No voy a "metaforear" Don Willy: con usted ya no se puede. De usar la metáfora tendría agua y sería lacrimal, así que desisto porque me emociona mucho.
Gracias. No era digno de entrar en su casa pero hoy, precisamente, estas palabras suyas bastaron para salvarme.
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